LLAMADO DE AYUDA PARA EL PUEBLO HAITIANO: Appel au secours pour le peuple Haitien: CALL FOR HELP FOR THE PEOPLE OF HAITI: APPEL AU SECOURS POUR LE PEUPLE DE HAÏTI


El pueblo haitiano vive más horas que nunca cada vez más difíciles y nadie parece querer indagar en la suerte que les impone el gobierno de Jovenel Moïse con sus bandidos que siguen sembrando el terror en todos los barrios, en todas las ciudades. son cientos de cadáveres todos los días. Sin olvidar, desde la llegada del régimen PHTK al poder en Haití, el pueblo haitiano ya no tiene acceso al agua potable, a la luz, mientras el revoltijo ensucia todas las calles y todas las ciudades del país.

Obviamente, además de los alborotos que diariamente realizan las bandas armadas del poder en el lugar, ya contamos varias masacres y cientos de casos de secuestros en los barrios más pobres donde no se ha hecho nada para detener y juzgar a los criminales del poder.

Frente a esta violencia sin precedentes que es orquestada, financiada y apoyada por el propio presidente Jovenel Moïse, nosotros, los firmantes de este llamado de ayuda, invitamos a todos los ciudadanos del mundo, así como a todos los países que son amigos del pueblo haitiano y que no lo hacen. No tengo interés en esta violencia, para ayudar al pueblo haitiano denunciando públicamente y con medidas contundentes contra el presidente Jovenel, que sigue aferrado al poder mientras ya no controla nada en el país. De hecho, controla la violencia que impone al país.

Además, si las desgracias que agobian actualmente al pueblo haitiano y a Haití en su conjunto son parte de cualquier plan para castigar a este pueblo haitiano o para crear condiciones para invadir y ocupar Haití, les decimos a los partidarios del régimen haitiano que no hagan nada y mantengan sus posiciones dejando que el pueblo haitiano perezca como quiera. Sin embargo, a todos aquellos que se reconocen como verdaderos amigos de los haitianos, los invitamos a actuar rápidamente acusando a Jovenel Moïse, su primer ministro y a todos sus ministros por crímenes de lesa humanidad.

Primer firmante: Hermann Cebert